El Acuerdo Interprofesional de Catalunya actuará como un convenio de convenios, es decir, que proporcionará a las empresas, los gremios y los comités la guía de negociación. Uno de los capítulos con más enjundia en las 37 páginas del texto es el dedicado a los sistemas retributivos.
«Han de racionalizarse, de manera negociada, las condiciones económicas, suprimiendo modelos salariales obsoletos y determinados complementos improductivos», indica el texto. En vez del esquema clásico de subir las nóminas con el índice de precios de consumo, las cúpulas sindicales y de la patronal quieren hacerlo con la «evolución económica de las empresas y sectores de actividad, al desarrollo y situación de los mercados, inflación, productividad, la variación de los costes, las inversiones y modernización tecnológica, entre otros».
Otro aspecto del pacto es el referente al absentismo, donde se pide a la Generalitat que mejore los mecanismos de control y valoración de las ausencias del personal mediante la informatización de los procesos y la formación del personal sanitario para decidir las bajas.
Texto extraído de El Periódico.