La semana del 20 de octubre varias páginas web recogieron la noticia de mi despido. Mi agradecimiento a todas las personas y organizaciones que han decidido esta difusión. Algún efecto debe estar haciendo, ya que los dos delegados colaboracionistas con la empresa han movido ficha.El lunes 20 interrogaron a compañeros de la CGT y al otro delegado de CCOO. Pretendían averiguar quien era el responsable actual de la sección sindical, si tenían conocimiento de esta información y si estaban de acuerdo con su contenido. Todo al más fiel estilo de tiempos pasados.
En días posteriores, mediante comunicación individual con cada un@ de l@s trabajador@s, recogen firmas para remitir un escrito a CCOO, donde califican la información sobre el despido de "campaña de difamación contra los delegados de CCOO". Lo curioso es que en el escrito para nada se menciona la acusación de COMPLICES CON EL DESPIDO DE UN TRABAJADOR. Transcribo parte del primer comunicado: Es sorprendente encontrar como cómplices a dos delegados de personal de CCOO que hay en la empresa, usando un silencio encubridor en el momento de la entrega de la carta de despido; ofreciéndose como testigos al negarse el compañero a firmar la carta de despedido; no convocando la asamblea que reclaman varios trabajadores; culpabilizando al trabajador despedido por su actitud "radical"; utilizando el miedo de que sobran 4 o 5 trabajadores más (cierre sección LM).
Eso sí, el escrito firmado hace mención a la trayectoria durante años de estos delegados, calificándola de intachable y de estar al servicio de tod@s l@s trabajador@s. Solo decir que por suerte hemos sido varias las personas las que nos hemos dedicado a la mejora de las condiciones de trabajo en Cecrops, y que recurrir al pasado para tapar el presente es una estrategia propia de modelos autoritarios.
El escrito finaliza con un "nuestro apoyo incondicional a los delegados de CCOO". ¿A los tres delegados, o solo a vosotros dos?, ya que al otro delegado (también de CCOO) padece una situación de marginación creada entre la empresa y vosotros, y así está denunciado en Inspección de Trabajo. La propio fórmula "apoyo incondicional a los delegados" es sospechosa, ya que el apoyo incondicional debe de ser de los delegados a l@s trabajador@s, incluso en caso de despido. También recordar que en el último año, frente a ese "apoyo incondicional" que se pretende, en la empresa hemos tenido divergencia por la huelga de enero 2007, denuncias de trabajador@s al comité de huelga durante la huelga de mayo – junio 2007, responsabilizar los dos delegados a un compañero de una dermatitis (quitando toda responsabilidad al encargado), no dar los delegados las cuentas solicitadas por un trabajador sobre atrasos, no convocatoria de asambleas solicitadas, ...
La presión y los rumores de despidos han sido los ingredientes que han aderezado la recogida de firmas. Flaco favor se hace al sindicalismo si convertimos la empresa más combativa del sector en las luchas del 2007, en un deseo mayoritario de causar una buena impresión a la empresa para no ser despedido. ¿Quién será el próximo de la lista a darle la espalda?.
Pero la cosa es más grabe. Lo que iba a ser una recogida de firmas para uso interno en CCOO (lavado de cara de esos dos delegados), al no ser firmado por la totalidad de la plantilla, ha sido colgado en el tablón de anuncios de la empresa. Con lo que la empresa ya puede iniciar el marcado de nuevas víctimas.
No se si será una pérdida de tiempo, pero me atrevo a solicitar a los sindicatos de CCOO que investiguen lo que está pasando en Cecrops. Que llamen a los tres delegados de su organización y verán que la realidad es entendida de distinta manera. Que llamen también a los desafiliados de CCOO y les pregunten porqué.
Salud
Jordi, afiliado a CGT y despedido
En días posteriores, mediante comunicación individual con cada un@ de l@s trabajador@s, recogen firmas para remitir un escrito a CCOO, donde califican la información sobre el despido de "campaña de difamación contra los delegados de CCOO". Lo curioso es que en el escrito para nada se menciona la acusación de COMPLICES CON EL DESPIDO DE UN TRABAJADOR. Transcribo parte del primer comunicado: Es sorprendente encontrar como cómplices a dos delegados de personal de CCOO que hay en la empresa, usando un silencio encubridor en el momento de la entrega de la carta de despido; ofreciéndose como testigos al negarse el compañero a firmar la carta de despedido; no convocando la asamblea que reclaman varios trabajadores; culpabilizando al trabajador despedido por su actitud "radical"; utilizando el miedo de que sobran 4 o 5 trabajadores más (cierre sección LM).
Eso sí, el escrito firmado hace mención a la trayectoria durante años de estos delegados, calificándola de intachable y de estar al servicio de tod@s l@s trabajador@s. Solo decir que por suerte hemos sido varias las personas las que nos hemos dedicado a la mejora de las condiciones de trabajo en Cecrops, y que recurrir al pasado para tapar el presente es una estrategia propia de modelos autoritarios.
El escrito finaliza con un "nuestro apoyo incondicional a los delegados de CCOO". ¿A los tres delegados, o solo a vosotros dos?, ya que al otro delegado (también de CCOO) padece una situación de marginación creada entre la empresa y vosotros, y así está denunciado en Inspección de Trabajo. La propio fórmula "apoyo incondicional a los delegados" es sospechosa, ya que el apoyo incondicional debe de ser de los delegados a l@s trabajador@s, incluso en caso de despido. También recordar que en el último año, frente a ese "apoyo incondicional" que se pretende, en la empresa hemos tenido divergencia por la huelga de enero 2007, denuncias de trabajador@s al comité de huelga durante la huelga de mayo – junio 2007, responsabilizar los dos delegados a un compañero de una dermatitis (quitando toda responsabilidad al encargado), no dar los delegados las cuentas solicitadas por un trabajador sobre atrasos, no convocatoria de asambleas solicitadas, ...
La presión y los rumores de despidos han sido los ingredientes que han aderezado la recogida de firmas. Flaco favor se hace al sindicalismo si convertimos la empresa más combativa del sector en las luchas del 2007, en un deseo mayoritario de causar una buena impresión a la empresa para no ser despedido. ¿Quién será el próximo de la lista a darle la espalda?.
Pero la cosa es más grabe. Lo que iba a ser una recogida de firmas para uso interno en CCOO (lavado de cara de esos dos delegados), al no ser firmado por la totalidad de la plantilla, ha sido colgado en el tablón de anuncios de la empresa. Con lo que la empresa ya puede iniciar el marcado de nuevas víctimas.
No se si será una pérdida de tiempo, pero me atrevo a solicitar a los sindicatos de CCOO que investiguen lo que está pasando en Cecrops. Que llamen a los tres delegados de su organización y verán que la realidad es entendida de distinta manera. Que llamen también a los desafiliados de CCOO y les pregunten porqué.
Salud
Jordi, afiliado a CGT y despedido
